miércoles, 26 de septiembre de 2012

Nuestro éxito es su miedo

La convocatoria ciudadana 25-S Ocupa/Rodea el Congreso ha sido un éxito pese a acabar con cargas policiales. Por cierto, uno de los manifestantes apaleado por la policía posiblemente quede parapléjico. ¿Un golpe "mal dado", una "mala caida" o pura saña en el "cumplimiento del deber" de algún miembro de la UIP? Las explicaciones sobre este incidente, como siempre en este país tan "democrático", no llegarán o llegarán deformadas, filtradas y tamizadas. Eso referente a las explicaciones; referente a las responsabilidades que algún miembro del ministerio de interior tenga por dicha actuación policial.... eso es clamar en el desierto. En el ámbito político España es el único país que ha borrado de su diccionario la palabra dimisión; y además ha olvidado el significado del concepto "asumir responsabilidades políticas". El despido libre para cualquier trabajador campa por España, en cambio en la clase política el despido ni se contempla como hipótesis. Este país además de un paraíso para el turismo es un paraíso para las paradojas.
La convocatoria reclamaba el inicio de reformas políticas y económicas capaces de garantizar una democracia verdadera en España. Desde el gobierno del PP la respuesta ha sido la que las fotografías muestran aquí y los vídeos aquí.
La reclamación de reformas políticas y económicas es algo que también el prestigioso periódico Financial Times publicó el pasado día 14 de Septiembre y ningún policía ha ido a apalearles a la redacción. La noticia del Financial Times hacía hincapié en que España "requiere un cambio drástico de las estructuras establecidas durante la Transición". Y el Financial Times no es uno de esos periódicos  que se suelen leer por la mañana sentados en el retrete antes de salir de casa para ir al trabajo.
Pero siempre hay gente que o no lee o no asimila lo que lee; como hay gente que vive en su mundo particular desconectados por completo de la realidad colectiva que les rodea. Un ejemplo de esto lo tenemos en nuestro campechano Rey Juan Carlos I, que desde la nueva página web de la Casa Real ha decidido blogear un poco y ha escrito una carta en la que nos conmina a (cito textualmente): "seguir unidos para no arruinar el bienestar que nos ha costado alcanzar" y añade "lo peor que podemos hacer es dividir fuerzas, alentar discusiones, perseguir quimeras, ahondar heridas..."
Dicen los expertos que esto lo dijo el rey en respuesta al reciente envite nacionalista catalán (que "casualmente" ahora ha tomado brío y ha logrado que la atención mediática se desentienda por un tiempo del rescate económico que el país está a punto de pedir). Pero también esas palabras del Rey pueden encajar ante el hecho de ver que cada vez más gente se cuestiona este sistema y estado actual, fruto precisamente de esa "añorada" Transición.
La reforma política primordial que hay que hacer en España es la de reinstaurar la República y abolir la Monarquía. Lo malo es que para eso hacen falta republicanos de corazón y de razón y de ese personal andamos escasos, especialmente entre la clase política.
Inciativas como la del 25-S Ocupa/Rodea el Congreso pone en evidencia las contradicciones y falsedades del actual sistema de gobierno en el que el pueblo o no pinta nada o siendo tremendamente optimistas pinta poco. Las críticas recibidas por parte de la caverna ultraderechista habitual, acusando de "golpistas" a los que apoyan la iniciativa del 25-S, es una muestra de que se va en el camino correcto. La democracia, que le quede a todo el mundo claro, es: "La doctrina política favorable a la intervención del pueblo en el gobierno" y " Predominio del pueblo en el gobierno político de un Estado".(R.A.E., dixit). El sistema en el que estamos viviendo desde esa Transición a la que muchos se agarran como a una tabla en el mar, tendrá un nombre no lo dudo, pero no es el de democracia.